La publicidad que es considerada excelente y exitosa es aquella que logra proyectar lo que su marca realmente desea vender. Es decir, los valores y atributos que lo diferencian de otros productos para lograr convencer al consumidor de que su marca es la mejor. Este proceso es largo y requiere de un extenso estudio de mercado para saber cuál es el mejor método para acercarse adecuadamente a su público meta.
Existen campañas publicitarias que toman como referencia aspectos culturales. Por ejemplo, las hay aquellas que deciden retomar el arte para tener referencias que no necesariamente deben ser complejas y pueden ser identificadas por el público rápidamente. Estas campañas pueden ser muy ingeniosas pero sobre todo: exitosas, pues no sólo publicitan su producto o servicio sino la obra original y al autor.
Ray-Ban – Andy Warhol
“Marilyn Monroe”
En 2009 la marca de lentes de sol Ray-Ban le rindió homenaje a Andy Warhol, artista plástico y cineasta estadounidense quien desempeñó un papel crucial dentro de la cultura Pop Art a mediados de los años 60 y 70.
La empresa multimillonaria lanzó una edición limitada de las gafas Wayfarer Andy Warhol; recordando que Andy fue fanático de la marca, retomaron el estilo pictórico utilizado por el artista: colores psicodélicos y fotografías que parecían hechas en serigrafía inspiradas en Marilyn Monroe.
Por alguna razón las agencias publicitarias aman retomar a los artistas surrealistas, miles de referencias anuncian productos o servicios con los artistas más famosos de la corriente. En este caso, la agencia alemana DDB apropia la obra de arte de Salvador Dalí y Rene Magritte, dos de los pintores más famosos entre la década de los 2o y 30. La técnica saca de contexto a los objetos, modificando la materia y jugando con espacios inexistentes.
El principal objetivo en esta campaña fue promocionar su línea de coches con bajo consumo de gasolina. Las fotografías reflejan claramente el estilo surrealista; la campaña tuvo éxito pero algunos críticos publicistas argumentaron que el mensaje no era claro y tenía tantos elementos que distraían el verdadero objetivo de anunciar su nuevo Golf 5.5.
Pantene – Leonardo Da Vinci
La Mona Lisa, quizá la obra pictórica más famosa de todo el mundo, es la pieza a la que recurren muchas agencias publicitarias. La obra hecha por el maestro Leonardo Da Vinci es de las más resignificadas en todo el mundo. En este caso, una empresa australiana decidió retomar la imagen de La Gioconda para publicitar su campaña Renueva el tiempo – Restaura la edad de tu cabello. Esta campaña fue famosa en ciertos países, y aunque no duró mucho tiempo, hoy queda en el listado de aquellas apropiaciones de la Mona Lisa.
La lechera – Johanners Vermeer
“La lechera”
Este anuncio es un claro ejemplo de cómo una resignificación puede renovar totalmente la identidad corporativa de la marca. La marca de postres lácteos de Nestle lanzó esta campaña asociándola con la obra de Vermeer del miso nombre. Esta apropiación fue tan obvia que formó parte importante de la identidad de La lechera. La original lechera de Johanners Vermeer es famosa por su sutil y bello empleo del color, composición y contenido de elementos. La obra neerlandesa actualmente es recordada con mayor valor por el producto La lechera, pero sin duda sigue siendo una obra del barroco muy representativa de su época.
Magimix – Magritte, Picaso y Leonardo Da vinci
La marca de batidoras y artículos de cocina lanzó una campaña en la que utiliza vegetales frescos y coloridos para aludir obras de arte muy famosas. El primer ejemplo es la obra “El hijo del hombre”, de René Magritte, y claro que el ingrediente principal es la manzana. El segundo es una referencia al artista español más reconocido del cubismo, Picasso, quien tiene una serie de retratos de mujeres sentadas, esta podría ser una de ellas. En el tercer caso se recurrió al cuadro más famoso de la historia, La Mona Lisa.
En la temporada Otoño-Invierno 2011, la marca de Zapatos Lippmann presentó una campaña fotográfica inspirada en retratos importantes del mundo del arte. Estas apropiaciones fueron muy similares a las obras originales, la composición, la luz, el vestuario y los elementos complementarios fueron muy asertivos.
En esta serie, con más de seis imágenes, se retoman obras de Jean-Marc Nattier, Georges de LaTour y Marie-Guillemine Benoist.
La campaña fue estudiada por críticos de arte, el fotógrafo requirió de una enorme producción, y el resultado fue de muy buena aceptación ante los críticos de la moda.
Perrier – Salvador Dalí
“La persistencia de la memoria”
Otra marca que decidió retomar a Salvador Dalí fue Perrier, su campaña No te derritas jugó con una ilusión óptica parecida a la del pintor surrealista. En este caso, la marca proyectó la frescura que ofrece su agua mineral; los elementos a su alrededor parecen estar bajo un calor extremo, pero lo único que se mantiene frío es Perrier. Esta serie tuvo buenas críticas y la producción de cada imagen fue muy bien cuidada, de tal manera que crearon un ambiente muy peculiar.
El contraste con los colores, la saturación de los elementos y la textura proyectan gran solidez al nombre de la campaña.